Ascenso del equipo de fútbol de Cazalla a Primera Andaluza

Están felices. Y es normal. Hay muchas horas invertidas detrás. Y es que la mayoría de la plantilla del Cazalla Balompié, ahora Club Deportivo de Fútbol de Cazalla, llevan en torno a 8 años juntos en esta “aventura” del deporte aficionado local. Desde entonces 3 ascensos. Desde 4ª Andaluza hasta 1ª. En 5 años. La racha se cortó hace dos años. El Cazalla se jugaba el ascenso a 1ª en casa frente al Demo. El empate les valía. Con 0-1 penalti a favor. Se falla y en el contraataque 0-2. El equipo acusa el varapalo al año siguiente. Pero como dice Manuel A. Pinelo “a veces se gana y a veces se aprende”.  

Hemos quedado con el cuerpo técnico y varios jugadores de la plantilla en el Estadio Municipal del Moro. El coronavirus ha frenado en seco la liga a falta de 9 partidos. En ese momento de la competición el Cazalla se encontraba segundo en la tabla a un solo punto del líder, Ibarburu. La federación andaluza ha dado por concluida la temporada del fútbol aficionado, por lo que la clasificación se ha quedado como estaba. “No es lo mismo ascender así a que pite el árbitro y salir todos corriendo a abrazarnos”, nos dice Blas Báez.  

Y es que ha faltado la celebración. Con los aficionados, con las familias, los amigos… la gente cercana que “soporta” la falta de los suyos para ir a entrenar en los días duros de invierno, con frío y lluvia en las desapacibles noches del Moro. Los fines de semana de partidos, los desplazamientos... 

Pero esto no quita la sonrisa en los rostros, el orgullo de haber llevado a un pequeño pueblo de la Sierra a la categoría máxima del fútbol aficionado provincial. Allí esperan equipos de pueblos con muchos más habitantes y recursos. Aquí lo paliamos “con el apoyo de la gente, que nos motiva” dice Luismi Pinelo.  

En un momento de la temporada el Puebla e Ibarburu se escaparon del resto por muchos puntos. Peliche cree que la victoria en Constantina aupó al equipo a que creyera en la remontada. Andrés Borón señala como clave la victoria a domicilio ante el Mosqueo, campo donde no había ganado nadie.  

Poco a poco se fue recortando la ventaja a los primeros. “Hemos hecho una mejor temporada fuera de casa que en nuestro campo”, comenta Miguel Carmona, máximo goleador del equipo pese a jugar de defensa.  

Eduardo Ventura tiene como anécdota que su padre también vivió un ascenso con el Cazalla allá por la temporada 86-87. Rubén Molina tiene experiencia en la nueva categoría, ya jugó en la Tercera División y la Primera Extremeña. Sabe que será difícil pero confía en la base sólida del equipo. Igual que Kaki, un pedroseño ya medio cazallero.  

El cuerpo técnico es una piña. Mientras hablamos con los jugadores, ellos no paran de conversar. Son tres. Pinelo, entrenador. Piedra angular. Cuatro ascensos con el Cazalla lo atesoran, además de Campeón de Andalucía y de España como seleccionador andaluz de fútbol femenino. “Lo interesante es saber dónde tienen el tope nuestros futbolistas”, nos dice. Unos futbolistas que en “el 90% son del pueblo”. Ha tenido la habilidad de incorporar a su grupo a Juan Corral, profesional del Área de la Educación Física, que sin duda ha hecho subir un escalón al equipo, pese “a lo difícil que es programar sesiones en un equipo aficionado”. Unos estudian, otros trabajan, “nos vemos un día a la semana, en los que hay que programar rutinas de grupo, individuales, así como tratar el aspecto anímico de los jugadores”. Francisco Ruda analiza a los rivales. “Dos semanas antes de que nos toque un rival me desplazo a ver los partidos, estudio sus virtudes y sus defectos, luego hago algunos videos y paso la información a nuestros jugadores”. Solo están él y otro analista en la categoría. 

Todos están de acuerdo en una cosa: y es que plantilla, cuerpo técnico, directiva, voluntarios, patrocinadores, afición.... Al final premia el dicho de “juntos más fuertes”. Aquí un ejemplo: “Club Deportivo de Fútbol Cazalla de la Sierra”. Ascenso a Primera Andaluza. Temporada 2019-2020. 

Artículo publicado en el periódico local "El Chorrillo" nº 358 de mayo de 2020